Oporto es una hermosa ciudad portuguesa, la segunda en cuanto a tamaño y población, cuna de uno de los mejores vinos del mundo. Como en cualquier época del año, pasear por su centro histórico es una delicia que no podemos perdernos, lo cual llevó a ser declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Algunos de sus grandes atractivos son el conjunto de la iglesia y la torre de los Clérigos, con una altura de 76 metros. Otro de sus monumentos más atrayentes es su impresionante catedral, construida en el siglo XII. Todo ello en un maravilloso entorno de calles de piedra y sorprendentes vistas a la desembocadura del río Duero en el océano Atlántico.
Algunos de sus grandes atractivos son el conjunto de la iglesia y la torre de los Clérigos, con una altura de 76 metros. Otro de sus monumentos más atrayentes es su impresionante catedral, construida en el siglo XII. Todo ello en un maravilloso entorno de calles de piedra y sorprendentes vistas a la desembocadura del río Duero en el océano Atlántico.
No obstante, estos lugares quedan resaltados por una bella iluminación en los meses de diciembre y enero, potenciando su encanto. Asimismo, Oporto disfruta de numerosos espectáculos para toda la familia, que van desde representaciones en algunos de sus teatros más prestigiosos hasta conciertos de música clásica en el famoso Coliseu do Porto.
Su descomunal árbol de Navidad es otro punto clave de estas fiestas. De hecho, se le concede una enorme importancia y por ello, en años anteriores, ha sido el árbol más grande de toda Europa. Sus hermosas figuras hechas con bombillas muestran elementos tradicionales de estas fiestas como velas, candelabros y acebo de navideño, entre otras muchas imágenes.
Igualmente, los centros comerciales disponen de una decoración similar, siendo uno de los lugares más transitados durante estos meses. Uno de los más populares es, sin duda alguna, el Norte Shopping, uno de los más grandes del país con más de 71.000 metros cuadrados.
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